La semana pasada comenzamos a presentar los resultados del diagnóstico que hemos estado desarrollando durante esta anualidad 2020 en la provincia de Cáceres.
En este capítulo, nos centramos en las 27 medidas ambientales que enumeramos a los ayuntamientos y mancomunidades de la provincia, y que fueron las siguientes.
Para cada una de ellas, las posibles respuestas eran:
- Desconozco en qué consiste.
- No es prioritario para mi ayuntamiento y/o mancomunidad.
- Lo hemos hecho en los últimos 8 años.
- Lo estamos haciendo en la actualidad.
- Lo queremos hacer en esta legislatura.
De este modo, se han podido identificar cuáles son las más desconocidas, y sobre las que deberían poder recibir información y/o asesoramiento, cuáles son las más importantes para ellos y cuáles quieren implementar en esta legislatura.
Así, en la siguiente imagen, se comparten las 5 que más se están desarrollando en la actualidad en la provincia de Cáceres:
Como puede observarse, la mayoría de ellas tienen una lógica esperada, debido a que, en general, se trata de medidas para las que las entidades locales tienen directamente competencias municipales. Estas medidas, a su vez, pueden relacionarse con el ODS 11 de ciudades y comunidades sostenibles, el ODS 7 de energía asequible y no contaminante y el ODS 6 de agua limpia y saneamiento. 3 ejes claves de trabajo en los ámbitos municipales desde el punto de vista del medio ambiente urbano. Condiciones necesarias, aunque no suficientes, para alcanzar un desarrollo urbano sostenible.
Por otra parte, en la siguiente imagen se comparten cuáles de estas 27 medidas medioambientales que se enumeraron, están menos desarrolladas/implementadas en la provincia de Cáceres.
La generación de corredores de biodiversidad es la que menos desarrollo tiene. Se entiende dado que muchos de los municipios que han contestado son de pequeño tamaño y están casi en conexión directa con la naturaleza, debido al propio tamaño del municipio. No obstante, los corredores de biodiversidad pueden ser una oportunidad para mejorar el bienestar de la ciudadanía así como para atraer a personas interesadas en disfrutar de la naturaleza y estar en contacto permanente con ella. Igualmente, dentro de los mismos, se están desarrollando ciertas experiencias como los "corredores para abejas".
Respecto a la Agenda 21 Local, hubo un tiempo en que en Extremadura se desarrollaron las mismas. Fueron las Agendas 21 Comarcales y/o Mancomunidades impulsadas por entidades provinciales, por la Junta de Extremadura e incluso por determinados ayuntamientos. Sin embargo, este programa fue "abandonándose". En diferentes territorios de España, sigue presente, como por ejemplo, en el País Vasco. Tal vez, debieran recuperarse en combinación con otros programas como los de ciudades saludables y sostenibles, los planes locales de adaptación y mitigación al cambio climático, los planes de acción local ODS, entre otros.
Los sistemas de alerta temprana para la detección de catástrofes son otras de las medidas que están menos implementadas en la provincia de Cáceres. Sin embargo, no por ello, dejan de ser interesantes. Ante una catástrofe, el tiempo de reacción cuenta y estos sistemas permiten reaccionar antes y mejor.
La gestión adecuada de zonas verdes municipales y/o planes de infraestructura verde urbana es otra de las medidas que está menos desarrollada en la provincia. La gestión de zonas verdes se está haciendo, dado que es competencia municipal y el mantenimiento de parques y jardines municipales es una realidad. Sin embargo, ¿se está haciendo bien? En este sentido, y más allá de la gestión aislada, han surgido los planes de infraestructura verde urbana, que ofrecen una gestión más integrada de las zonas verdes y que introducen más modalidades de infraestructura verde. Una apuesta que viene fuerte desde Europa.
Finalmente, los planes locales de adaptación y mitigación al cambio climático también se encuentran entre las medidas menos desarrolladas. No obstante, no debe descuidarse esta medida dado que los escenarios climáticos esperados para Extremadura no deben ignorarse. Mediante la implementación de estos planes, y a través del desarrollo de medidas "blandas, verdes y grises" los municipios pueden disminuir su vulnerabilidad climática, a través del aumento de su capacidad adaptativa y de la disminución de la exposición y la sensibilidad. Todo ello, además, lleva asociado una serie de cobeneficios, que no sólo tienen que ver con la salud del planeta, sino claramente, con la salud de las personas y la sostenibilidad de la vida.
Recientemente, desde CONGDEX, ya hemos compartido el diagnóstico realizado. Puede descargarse aquí.
En el próximo capítulo, continuaremos con las variables sociales.
Lo escribe: PAZ HERNÁNDEZ PACHECO
Cartografía asociada: JULIÁN HERNÁNDEZ COTRINA
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